La edila Norma López, remarcó la necesidad de establecer políticas públicas de prevención, educación, atención, reinserción laboral y social y protocolos de actuación para terminar con el flagelo de la violencia de género, que sigue cobrándose víctimas en la ciudad.
Prensa Concejo Municipal
En ese sentido, la vicepresidenta del Palacio Vasallo, señaló que «la violencia contra las mujeres continúa siendo un problema social que no ha dejado de crecer y la ciudad de Rosario no es una excepción. Si bien el número de feminicidios ha descendido, sigue siendo alarmante la cantidad de casos de violencia de género y la falta de políticas pro activas al respecto».
La declaración mencionada fue sancionada el 13 de septiembre de 2012 y facultó al Ejecutivo a reasignar las partidas presupuestarias necesarias para incrementar y profundizar tareas preventivas para afrontar la emergencia.
La iniciativa había sido presentada a instancias de la Multisectorial de Mujeres Rosario, por las concejalas María Eugenia Schmuck (UCR), Fernada Gigliani (PPS), María Julia Bonifacio (Unión PRO) y la citada edila.
«El área de la Mujer de la Secretaría de Promoción Social de la Municipalidad de Rosario recibe permanentemente llamados al Teléfono Verde de mujeres solicitando ayuda por situaciones de violencia doméstica pero a las carencias de atención se suman los problemas de resolución por falta de políticas municipales que brinden soluciones a las mujeres”, señaló la legisladora.
“No vemos que la reasignación de partidas se efectúe, no se establecen protocolos de actuación, no se buscan caminos para que las mujeres golpeadas junto a su familia puedan tener alternativas económicas. Creemos necesario que todos los sectores se vinculen con la temática y que deben establecerse, en forma urgente, protocolos de atención, capacitación del personal y medidas informativas y concientizadoras más profundas», aseguró Norma López.
En tanto, «el gobierno provincial sigue en deuda con las mujeres. En las últimas dos campañas electorales del socialismo en Santa Fe, -es decir las gestiones de Binner y Bonfatti-, prometieron políticas sustentables en materia de género. Las santafesinas aún esperan»
La edila recordó las iniciativas aprobadas e impulsadas por el bloque del Frente para la Victoria, en noviembre de 2013, en la implementación de una Guía de Actuación en Violencia de Género (GAVG), que establecía un conjunto de medidas y herramientas con el fin de informar y asesorar sobre derechos y garantías en materia de violencia de género, así como sensibilizar y prevenir a la población.
También hizo referencia a la implementación del Programa de Capacitación y Formación en Violencia de Género; con el objetivo que la intendencia capacite a todos los trabajadores y trabajadoras de las secretarías de Salud, Promoción Social y de Prevención y Seguridad Ciudadana, acerca de la violencia de género y por último, la convocatoria a jornadas de trabajo para el abordaje de situaciones de Violencia de Género, con el fin de consensuar aportes y conclusiones para la elaboración de un Protocolo de Actuación en Salud para la Actuación en Violencia de Género.
«El Municipio debe avanzar en la inserción laboral para mujeres víctimas de violencia de genero así como en la implementación de un conjunto de herramientas e incentivos para la promoción del empleo y la inserción laboral, en el sector privado, en el empleo público y en el autoempleo como en la posibilidad de accesibilidad a la vivienda para mujeres victimas; todas iniciativas que ya hemos presentado», concluyó la concejala.
Cifras
El Teléfono Verde recibió 1395 llamadas desde el 1º de enero al 31 de agosto, de las cuales 1291 pertenecieron a situaciones específicas de violencia de género.
El sábado se cumplieron dos años de la declaración de emergencia en violencia de género de la Municipalidad de Rosario, una ordenanza que el oficialismo resistió. «Nuestro balance es negativo y crítico sobre la inacción del municipio. Ninguno de nuestros pedidos fue cumplido. Con la excepción de la atención del Teléfono Verde las 24 horas, aunque el servicio sigue siendo insuficiente. La falta de líneas rotativas hace que muchas llamadas queden sin ser atendidas, la falta de personal capacitado hace que la mayoría de las mujeres que logran comunicarse no sean acompañadas y asesoradas de manera efectiva. Lo más grave, lo expresa la falta de refugios para víctimas, lo cual hace que los márgenes con los cuales se mide la gravedad de la situación y el riesgo de cada mujer sea cada vez más difuso. Falta de presupuesto y de voluntad política es lo que han demostrado los distintos niveles del estado estos años», expresó Majo Gerez, integrante de la Multisectorial de Mujeres Rosario, que participó de la lucha para obtener esa ordenanza y que actualmente es secretaria de Género de la CTA Rosario. (Fuente¨Rosario 12 / 15/9/2014)