Dice Carlos Del Frade: «Lo condenaron a morir en la pobreza porque peleó y se hizo líder popular para enarbolar en la vida cotidiana de los argentinos otras banderas: igualdad, respeto por las mujeres y los pueblos originarios, que el estado fomente la industria y la marina mercante antes de establecer relaciones carnales con los imperios de turno, ciudadanía a los gauchos aunque no fueran propietarios, patria grande, educación garantizada para los menores de dieciocho años y trabajo para los mayores de esa edad como lo dijo e hizo en el casi desconocido reglamento de los 30 pueblos de las Misiones en diciembre de 1810.
Por eso, un día como hoy, de 1820, Belgrano murió entre urgencias y desesperaciones. La celeste y blanca era una esperanza para los que no creían en nada. Las otras banderas son imprescindibles de enarbolar en la vida cotidiana para que la felicidad no sea la propiedad privada de unos pocos. Los invito a ver el documental periodístico que hicimos en forma paralela a la construcción de nuestro libro «Los caminos de Belgrano»
Este es el video documental que compartimos en enREDando.