Justicia, delito y prisión a 30 años de democracia
¿Forma parte de nuestra cultura, la práctica de la tortura? ¿Existe una naturalización que viene desde el fondo de los tiempos y todavía echa raíces en el corazón de una sociedad que no quiere mirarse intramuros? Las preguntas formaron parte de la charla debate que tuvo lugar en el Museo de la Memoria de Rosario: «Violencia de Estado. Justicia, delito y prisión a 30 años de democracia en la Argentina».
Por Pablo Álvarez/ Alapalabra
Allí estuvo Alapalabra, en el mismo sitio donde funcionaba el Comando del Segundo Cuerpo de Ejército. El panel fue integrado por el doctor Elías Carranza, Presidente del Instituto Latinoamericano de las Naciones Unidas para la Prevención del Delito y el Tratamiento del Delincuente (ILANUD); Gonzalo Stara, Fiscal federal, Titular de la Unidad de Asistencia para Causas por Violaciones a los DDHH durante el Terrorismo de Estado de Rosario; la doctora Carmen Maidagan y Lilián Echegoy, integrantes de la Coordinadora de Trabajo Carcelario.
Compartimos aquí el audio, apenas un fragmento, con la exposición del doctor Elías Carranza: «Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes en los Lugares de Detención en los Países de América Latina».
La jornada se inició muy temprano, apenas entrada la tarde, con una visita por el ex Centro Clandestino de Detención del Servicio de Informaciones de la Policía Provincial, convertido hoy en el Centro Popular de la Memoria (en la intersección de las calles San Lorenzo y Dorrego).
Del recorrido, junto a las Madres de Plaza 25 de Mayo y Familiares de Detenidos y Desaparecidos por Razones Políticas, participaron el Dr. Elías Carranza, Presidente del Instituto Latinoamericano de las Naciones Unidas para la prevención del Delito y el Tratamiento del Delincuente (ILANUD); el Dr. Gonzalo Stara, Fiscal federal a cargo de la Unidad de Asistencia en Causas por Terrorismo de Estado; la Dra Carmen Maidagan, abogada de la Coordinadora de Trabajo Carcelario (CTC); y el artista estadounidense y educador de la Universidad de Wisconsin (USA), Brian Carlson, quien se encuentra exponiendo su obra «Aparecidos» en el Museo de la Memoria de Rosario, donde se realizó posteriormente la charla debate que propuso pensar el tormento desde su lógica histórica, cultural y política.
-Me han pedido, desde la Defensoría General de la Nación -contó en el inicio el doctor Elías Carranza- participar esta misma semana en las actividades que tendrán lugar en la Biblioteca Nacional, conmemorando los 200 años de la Asamblea del Año XIII, en la que, como sabemos, fueron abolidos los títulos de nobleza y la esclavitud. Pensé entonces el leerles esta misma noche la exposición que allí llevaré, a la ciudad de Buenos Aires…
Así comenzó la extensa exposición que recorrió la historia y el presente de América Latina y los tormentos que suceden intramuros y de mil formas suelen ser naturalizados.
El doctor Elías Carranza vive hace décadas en Costa Rica, tras exiliarse poco tiempo después de haber permanecido detenido en Coronda y en el Servicio de Informaciones de la Jefatura de Rosario. Hace muy poco tiempo, en abril de 2011, tuvimos oportunidad de presenciar su desgarrador testimonio en los Tribunales Federales de Rosario, frente al Tribunal Federal Oral número 2, en el marco de la causa Díaz Bessone (ex Causa Feced). A principio de los años setenta, Elías Carranza había sido sumariante de la Comisión Bicameral que produjo el memorable informe que puso sobre la mesa las pruebas e identificó a los autores del crimen de Ángel Brandazza, el joven trabajador y estudiante de Ciencias Económicas secuestrado el 18 de noviembre de 1972. Tiempo antes, desde el año 1964, había trabajado en el Juzgado de Instrucción de la Tercera Nominación de Rosario, en la investigación que por primera vez había verificado la tortura asociada a un fenómeno de clase social.
Todas ellas habían sido suficientes razones para que la patota fuera a buscarlo, un 18 de febrero de 1977, y lo secuestrara cuando volvía a su casa en auto, desde su trabajo en los Tribunales Provinciales.
Hoy Elías Carranza es un criminólogo reconocido internacionalmente. Dirige el Instituto Latinoamericano de las Naciones Unidas para la Prevención del Delito y el Tratamiento de Delincuentes (ILANUD), y con la misma pasión que jamás pudieron arrebatarle sigue investigando y produciendo conocimiento sobre la situación penitenciaria en América Latina y en el Caribe, partiendo desde una investigación histórica.