A las 10 de la mañana tendrá inicio el acto de apertura del XXXI Encuentro Nacional de Mujeres que se lleva a cabo por tercera vez en la ciudad de Rosario. Se espera la participación de alrededor de 70 mil mujeres que con enorme esfuerzo llegan desde diferentes rincones del país. Habrá cerca de 140 actividades culturales en simultáneo, 69 talleres y una masiva e histórica Marcha con un recorrido de 40 cuadras. El acto de cierre se realizará el día lunes en el Monumento la Bandera, con la lectura de las conclusiones y el anuncio de la próxima sede.
Durante un año, la Comisión Organizadora del 31 Encuentro Nacional de Mujeres delineó, debatió, consensuó y trabajó arduamente para organizar lo que ya es el Encuentro más importante y el más esperado del año: el pogo feminista más grande del mundo.
Rosario es la sede que fue elegida en octubre pasado en Mar del Plata. Es la ciudad que cobija a unas 70 mil mujeres que llegan desde diferentes lugares del país y el mundo. Es Rosario la que tiene en su haber dos encuentros nacionales realizados, en 1989 y 2003, en el marco de un contexto político, social y económico tan convulsionado durante esos años, con un movimiento de mujeres que crecía y se fortalecía en la conquistas de derechos y en el reclamo que comenzó a ser historia en el 2003: la legalización y despenalización del aborto.
Será también Rosario la ciudad que reúna en estos tres intensos días, las emociones y los abrazos de miles de mujeres, así como también sus miradas, sus debates, sus sentires y sus diferentes realidades: de allí -de la diversidad -nacen los 69 talleres que tiene este 31 Encuentro Nacional.
El Galpón 17, frente al Monumento a la Bandera fue este viernes 7 la antesala para comenzar la inscripción de las miles de mujeres que participan, y ofrecer ante los medios una conferencia de prensa integrada por voceras de las distintas comisiones, entre ellas, la Comisión de Comida. Imprescindible si se tiene en cuenta el enorme trabajó que significó garantizar las viandas de almuerzos para gran parte de las encuentreras. Esfuerzo que también debió enfrentar el incumplimiento del gobierno nacional que de las 40 mil viandas prometidas solo envió 10 mil. “Intentamos conseguir una parte importante de estas viandas, porque entendemos que vienen mujeres que estan haciendo un gran esfuerzo para viajar. Y una vianda digna junto con el alojamiento es fundamental para que aquellas mujeres que menos tienen puedan vivir el Encuentro de la mejor manera”, señaló una de las compañeras de esta Comisión.
“Fue un desafío muy grande. Estamos muy orgullosas de lo que hemos logrado, somos 200 compañeras que hicimos un trabajo incansable”, remarcaron con orgullo. Y ese esfuerzo es el que se vé en cada una de las pecheras blancas que las 200 integrantes de la organización llevan con amor, ante todo. Porque organizar un Encuentro Nacional de Mujeres requiere ser parte de un colectivo diverso y amplio de mujeres que entienden y sienten que lo personal siempre es político. “El proceso de construcción es silencioso y de mucha pelea. En todas partes del país mientras nosotras nos reuniamos, en todas partes, había mujeres en los barrios juntando plata para poder viajar, y eso nos fortalecía muchisimo para poder llegar a esto. Cuando hicimos la propuesta el año pasado, festejamos pero ni nos imaginábamos esta tarea, pero fue posible hacerla”, se escuchó en voz de una de las tantas integrantes de la Comisión Organizadora.
“Este encuentro molesta mucho, hicimos mucho esfuerzo para poder mostrar lo que es el Encuentro y le pedimos a los medios que muestren lo que esto significa, somos mujeres que hacemos un gran esfuerzo para venir desde diferentes lugares del país. Más allá de las provocaciones, el Encuentro son miles de mujeres que cada año se suman más”, puntualizaron.
También se hizo hincapié en la importancia social, cultural, política que tienen los encuentros, de los cuales han nacido y se han parido luchas fundamentales que han redundado en legislaciones a favor de los derechos de las mujeres a lo largo de la historia. No hubo reparos para dirigirse a uno de los actores que más reproduce la violencia machista: el poder judicial.
“La justicia es uno de los blancos donde vemos que se reproduce desde revictimización hacia las mujeres, fallos misóginos y violencia institucional. De hecho el recorrido de la marcha tiene como punto tanto los Tribunales provinciales como los federales. Acá es importante que se conozca el caso de Yamila que está siendo acusada y está condenada por la justicia por homicidio. Queremos visibilizar esto porque el fallo marca una intencionalidad muy clara, donde se la responsabiliza y se la culpabiliza de lo sucedido. Tenemos que dar esa lucha, y pedir la libertad de Yamila es una de las banderas que vamos a levantar en este 31 Encuentro Nacional de Mujeres”.
“Nosotros no trabajamos por la oposición, cada momento es un trabajo de crecimiento, uno de los corazones del encuentro son los Talleres donde se discuten todas las problemáticas que pueden afectar a las mujeres, es un espacio de educación popular porque se parte de la propia experiencia para analizar las causas estructurales de la opresión hacia las mujeres, por lo tanto no nos oponemos a nadie, si hay movimientos de oposición tendrán que plantear y explicitar porque se puede estar en contra de que todas las mujeres sin ninguna distinción, podamos ejercer nuestros derechos y no ser ciudadanas de segunda”, plantearon de forma contundente como respuesta a la pregunta sobre la actitud de aquellos sectores que, bajo campañas anónimas y estigmatizantes, se oponen a la realización del Encuentro.
Otra de las Comisiones que llevó adelante la organización del Encuentro es la de Contenido, aquella que tiene a su cargo la diagramación de los talleres que se realizan el día sábado por la tarde y domingo por la mañana. Las voceras de dicha comisión dieron cuenta de la importancia de contar con dos temáticas que se trabajaran por primera vez en talleres: Mujeres y Canabbis y Mujeres y Afrodescendientes. “Estuvimos tomando todos los talleres de años anteriores y fuimos debatiendo, efectivamente fue una tarea muy compleja, porque la comisión organizadora de este encuentro de mujeres es lo más heterogénea y lo más amplia posible y nunca estuvieron cerradas las puertas para absolutamente ninguna mujer, de ninguna clase social, de ninguna organización, de ningún tipo digamos, cualquier mujer pudo venir hasta que se cerró creo que el 30 de agosto.” También se retoma, luego de años sin realizarse, el Taller de Mujeres y Trabajadoras Sexuales, recordando que fue la militante Sandra Cabrera, asesinada por la policía santafesina en enero de 2004 quien lo coordinó por última vez en el año 2003.
La feminización de la pobreza es otra de las temáticas que tendrá su propio taller dentro del Encuentro. “Lo que va a pasar el fin de semana es que va a estar en discusión lo que pasa con las mujeres en todo el país. Una de las cosas que ya se venían viendo ya desde el año pasado, uno de los grandes temas, era el tema del hambre y la pobreza”. Es este Encuentro Nacional de Mujeres un grito también contra las políticas de ajuste que implementa el gobierno de neto corte conservador como es el de Mauricio Macri.
Con respecto al taller de Mujeres, Cárcel y Servicio Penitenciario, las organizadoras explicaron que se llevará a cabo un taller en la Unidad 5 con las internas del penal y que luego, las conclusiones de dicho taller serán leídas en el acto de cierre en el Monumento a la Bandera. “Las voz de esas mujeres se van a escuchar y van a ser públicas como la de todas las conclusiones de los talleres”, argumentaron.
El debate nació a partir del reclamo de la ONG Mujeres tras las Rejas que había solicitado y gestionado que la realización de este taller se realizara dentro de la Unidad. En este sentido, la Ong emitió recientemente un último comunicado en el que criticaron la decisión de la Comisión Organizadora y explicaron que los talleres que se realizaran en el penal no se encuentran en el listado oficial del Encuentro. (Ver comunicado)
Cultura en el Encuentro
Innumerables son las actividades culturales que se desarrollaran durante estos días. El largo listado incluye proyección de documentales, presentaciones de libros, charlas abiertas en las plazas, teatro, música y la realización de la Radio Abierta en la Plaza San Martín. El domingo se realizará la marcha oficial con un recorrido de 40 cuadras que incluye puntos fundamentales: los Tribunales provinciales y federales, Anses y la Catedral.
“Esta es la oportunidad para ser el primer Encuentro de muchas”, manifestaron. Si bien son numerosas las integrantes de partidos políticos y sindicatos que participan, son muchas también las mujeres que viajan solas y en algunos casos, por primera vez a un Encuentro Nacional.
35 mil mujeres serán alojadas en 150 escuelas de la ciudad y se prevé la realización en simultáneo de 140 actividades culturales. Rosario tendrá como bandera los gritos de muchos de los reclamos que el amplio movimiento de mujeres impulsa a lo largo y ancho del país: la legalización y despenalización del aborto así como también, la denuncia por el aumento de femicidios en todo el país, siendo Rosario una ciudad declarada en emergencia por violencia de género.
Las calles ya sienten la sororidad y la energía que solo generan los Encuentros de Mujeres. La emoción está en el cuerpo, en las miradas. En la diversidad de cada una de las encuentreras. «Las mujeres hemos parido un movimiento social que nos permite expresarnos. Es rico, diverso, democrático. Avanzando desde lo individual a lo colectivo, nos convocamos a transformar una sociedad injusta, una sociedad en la que no solo sufrimos un profundo agravamiento de nuestra calidad de vida sino también condiciones históricas que nos afectan en forma especial, por el solo hecho de ser mujeres, como la violencia sexual, la violación el acoso la discriminación, la feminización de la pobreza». Con estas palabras daba comienzo el XVIII Encuentro Nacional de Mujeres en el Monumento a la Bandera, en el año 2003.
Trece años después, esas palabras retumbarán como eco en un Monumento a la Bandera que cobijará en el acto de apertura previsto para este sábado a las 10 de la mañana a unas 65 mil mujeres de todo el país. La revolución feminista ya no será televisada: será vivida en las calles, en las escuelas, en las facultades y en las plazas.