El día Internacional de lucha contra la violencia de género es una jornada intensa también en el espacio virtual. Hoy comienzan los 16 días de activismo – desde el 25 de noviembre hasta el 10 de diciembre –propuestos desde el movimiento Dominemos la Tecnología lanzado por el Programa de derechos de las mujeres de la Asociación para el Progreso de las Comunicaciones (APC).
Por Laura Charro
En estos días la propuesta es reforzar la solidaridad mediante el intercambio de estrategias para contrarrestar la violencia hacia las mujeres en los espacios digitales, blogs, redes sociales, etc, como espacios de extensión de la violencia machista que sufrimos en nuestra vida cotidiana y por el sólo hecho de ser mujeres.
Desde el intercambio de historias y experiencias, la organización y el activismo colectivo, la transformación de las herramientas virtuales hacia un enfoque de seguridad personal o grupal y hasta acciones con miradas a futuro como planificación del activismo, serán algunas de las propuestas de esta campaña de Dominemos la Tecnología. De esta manera, podemos las mujeres tomar conciencia de los usos diversos de la tecnología como una herramienta de empoderamiento, construcción y participación y no sólo como un bien de consumo masivo, expuesto a violencias machistas.
La campaña propuesta pretende hacer foco en la autonomía, la agencia y la seguridad de las mujeres. Además, plantea la preocupación ante el trabajo de desarrolladores/as que diseñan aplicaciones de seguridad sin consultar a las mujeres que experimentaron violencia en línea, descuidando la riqueza y diversidad de las experiencias personales y narrativas que serán expresadas en estos 16 días de activismo. En países como Colombia, México y Brasil habrá también talleres y ferias ciberfeministas para compartir estrategias de supervivencia ante violencias y amenazas en línea.
Las nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs) son espacios dominados y controlados mayormente por hombres, desde programadores hasta usuarios en línea y no escapan de la lógica patriarcal donde se expresa una asimetría de poder con respecto a las mujeres. Es desde esta lógica se manifiestan violencias graves como chantajes, agresiones continuas, ciberacosos, viralización de imágenes o videos no autorizados donde el cuerpo de las mujeres es protagonista, discursos de odio, censuras de opiniones políticas y autocensuras.
Es importante plantearnos, dentro del contexto actual de monopolio de plataformas digitales como Facebook, Twitter, Instagram, etc, cómo las mujeres podemos apropiarnos de las tecnologías desde una alfabetización digital que nos permita desnaturalizar violencias, estar al tanto de alternativas digitales seguras, aprender a utilizar las tecnologías parea navegar, programar, crear contenidos propios y seguros y así posibilitar la diversidad de voces y, en definitiva, el derecho humano a la comunicación.
Los hombres suelen recibir también agresiones por su profesión o ideología política o religiosa en las redes. Sin embargo, las mujeres tenemos un agregado: somos agredidas por nuestro género y se nos hace foco en nuestras características físicas o preferencias sexuales con un lenguaje de ataque sexista basado en nuestra apariencia, nuestra capacidad intelectual, amenazas de abusos sexuales, etc.
Es imprescindible poder visibilizar y desnaturalizar las violencias en espacios virtuales, atacarlas, compartirlas y poder así encontrar una salida colectiva a una práctica patriarcal que encuentra su lugar en todas nuestras trincheras de acción y activismo. Romper con nuestra participación sólo en espacios estereotipados (foros de cocina, maternidades, decoración, etc) y hacernos un lugar donde parece estamos exentas para opinar, decir, actuar, desde un lugar de seguridad, reforzando la solidaridad de género y como sujetas de derechos.