A siete años de la desaparición de la sanlorencina Paula Perassi, Alberto y Alicia, sus padres, tienen la fuerza para la lucha intacta y el mismo deseo del primer día: saber qué pasó con su hija y poder contarles la verdad a sus nietos.
Por Flavia Campeis, nota publicada en Periódico Síntesis / Foto: Cooperativa de Comunicación La Brujula
Paula tenía 34 años, estaba embarazada de seis semanas y tenía dos hijos de 3 y 6 años. Desapareció el 18 de septiembre de 2011 de la ciudad de San Lorenzo, cuando, según la hipótesis más fuerte, un hombre con el que sostenía una relación la obligó a realizarse un aborto contra su voluntad, en el que murió. En una entrevista realizada con SÍNTESIS, Alberto, quién se transformó en un referente de la lucha en la región, recordó cómo fueron estos años de búsqueda, las trabas con las que se encontraron y la exigencia para que pronto inicie el juicio.
A siete años, ¿Cómo analizan la causa en la justicia?
Acá la justicia de San Lorenzo fue la que demoró todo, pero hace dos años y medio que la causa está en Rosario y las cosas fueron cambiando cuando entró el fiscal de esa ciudad, ahí tuvo un giro de 90 grados, eso cambió totalmente la situación y empezaron a aparecer las cosas.
Cuatro años tuvieron demorado aquí el caso con la justicia, la policía y el poder político y ese entorno cerrado que hay en este caso Perassi.
Todo eso tiene que ver, como siempre dije yo, con el teléfono político y la billetera con dólares. Es un conjunto de cosas, que Paula lamentablemente cayó ahí dentro, de esa organización donde está la Unidad Regional XVII, la Justicia de San Lorenzo y la política de la ciudad. Si esas tres patas no estuviesen de acuerdo, Paula no hubiese desaparecido.
Este caso los llevó a denunciar la situación de impunidad en la región, no considerándolo un hecho aislado, sino parte de un todo.
La gran impunidad que funciona y funcionaba en el Cordón Industrial, tanta impunidad, llevó a hacer desaparecer una persona, yo creo que fue lo máximo de impunidad que hicieron. Pasó el tiempo y ahora las cosas se van aclarando, se sabe cómo es todo, pero de cualquier manera ese teléfono político y esa billetera con dólares siguen estando presente. Quizá no con tanta fuerza, porque los que reciben los dólares están en otra posición, pero sigue estando el pacto cerrado de silencio, sigue estando todo.
¿La esperanza está en el momento del juicio?
Esperemos que en el juicio, donde va a haber mucha gente que va a tener que declarar, se sepa todo. El juicio va a llevar un tiempo y vamos a hacer una carpa afuera de Tribunales de Rosario para darle fuerza a todo esto.
Tengo muchas organizaciones de mujeres que van a ayudar, son ellas quienes tienen que agarrar la posta de todos esto, porque van a tener hijos, nietos, porque tenemos que alejarnos de estas cosas y que no pasen nunca más. Las mujeres tienen que salir a defender a las mujeres.
Esperemos que en el juicio sepamos lo que pasó con Paula, si bien se sabe todo cómo fue, pero que la Justicia tome cartas en eso.
¿Qué pudieron reconstruir de lo ocurrido con Paula hasta ahora?
Nosotros a los cuatro días que pasa todo esto nos enteramos que Paula tenía un amante, Gabriel Strumia y que estaba embarazada de él. Se ve que ha habido problemas internos en su familia, se ve que alguien tomó una decisión y tenían a disposición la parte policial, donde eran capaces de hacer estas cosas, tenían los recursos para hacerlo, porque sino esto se hubiera descubierto a los pocos días. Porque al tercer día cuando se supo que la habían llamado a Paula de una cabina telefónica, fueron a buscar los casetes de la filmación cuando ya se había borrado todo eso. Ahí empieza la mala leche y el arreglo y todo lo que pasó después, que fue la policía y también el juez Filocco, quien me dijo que “era una loquita que se había calentado, que se le iba a pasar e iba a volver”.
Aparentemente la llevaron a hacer un aborto forzado porque estaba embarazada de Strumia, ella tenía problemas y quedó en ese momento. Después de eso, tenían los recursos de la policía, de gente poderosa, y se ve que la hicieron desaparecer, ya sea vía funeraria o incinerándola en IDM o en una cava, donde se buscó y no encontró nada. A siete años no se sabe qué hicieron con ella.
¿Qué los sostuvo todo este tiempo?
Nos sostuvieron los nietos y saber qué pasó y buscar los huesos de Paula. Yo no quiero meter preso a nadie, siempre lo dije, busco los huesos de Paula para decirles a mis nietos qué pasó y tener un lugar para ir a llorar.
Porque mucha gente ha perdido un hijo, pero tiene a donde llevarle una flor y llorar, pero nosotros no tenemos nada, no sabemos qué pasó y no podemos decirles a nuestros nietos que pasó con su madre. Ellos crecieron, el más grande tiene 13 años, y no tenemos una respuesta y esa respuesta nos la debe la justicia provincial, es un derecho que tenemos, ese derecho lo estuvieron tapando, tratando de que no se sepa, de no resolverlo, eso es lo grave, lo malo que hicieron contra nuestra familia. Somos una familia que nunca hemos tenido una raya, y estos delincuentes nos hicieron muy mal, nos ultrajaron, ¿para qué? Para seguir con el poder económico de ellos, de esas tres fuerzas que saben qué pasó con Paula y dónde está.
¿Qué sería para ustedes que haya Justicia?
Que haya justicia será tener los huesos de Paula, si no se sabe o no lo dicen, quiero que le den perpetua y se pudran en la cárcel. Pero no sé si con eso podré seguir viviendo, pero por lo menos saber que la gente que hizo esto, hoy está presa, porque saben perfectamente lo que pasó y lo que hicieron y encima dicen que no tienen nada que ver.
A lo largo de este tiempo te convertiste en un referente de lucha, ¿Qué le dirías a quienes pasan por alguna injusticia?
Tienen que entrar en una lucha desesperada como la mía. Yo creo que no existe la justicia, si ganan muy bien, pero no existe. No hay que aflojar, en lo mío intentaron cuatro años esperar que yo me muera, que caiga, que la termine, hicieron todo, pero no lo pudieron lograr y eso es lo que hay que lograr que no te paren e ir adelante, al frente y pedir justicia, es lo que te tienen que dar, lo que necesitamos, Justicia. Pero resulta que en esta provincia el caso Perassi influye para arriba y se demoró, se pisó.
A la espera del juicio
Este 18 de septiembre, la familia de Paula decidió no realizar ningún tipo de movilización, como tantas veces se han hecho en estos años, para esperar así el proceso en la justicia y que pronto se inicie el juicio, que se espera pueda ser en los próximos meses.
Mientras tanto, por este caso, continúan en prisión en una cárcel común: el principal sospechoso, indicado como amante de Paula, Gabriel Strumia; la esposa del mismo, Roxana Michl; la mujer señalada como quien realizó el aborto en el que habría muerto Paula, Mirta Ruñisky y el ex empleado de Strumia, Darío Antonio Díaz.
Por otra parte, los policías acusados de encubrir el hecho siguen con prisión domiciliaria, entre ellos: el ex jefe de cuerpos de la Unidad Regional XVII, Daniel Puyol, los oficiales Aldo Gómez, Ramón Godoy, María José Galtelli y el ex jefe de Agrupación de Unidades Especiales, Enrique Krenz.