Agencia Sin Cerco cumple un año en el campo de los medios rosarinos y lo celebra con una muestra donde confluirán fotografías, producciones audiovisuales y recortes periodísticos. Los diversos soportes buscan reflejar el trabajo realizado en estos últimos doce meses por las compañeras y compañeros que colectiva y comprometidamente fuimos creando una nueva forma de comunicar.
«A efecto de conmemorar nuestro primer aniversario, las y los invitamos a participar de la muestra multimedial que tendrá lugar el jueves 27 de abril, a las 19 h, en el Centro de Formación Profesional Pichincha del Sindicato de Prensa Rosario (Santiago 146 bis)», sostienen sus más de 20 integrantes, periodistas, fotógrafos y realizadores audiovisuales que integran el medio y aspiran a conformarse en una cooperativa.
«Nunca antes esta aventura del periodismo, para quienes integramos Sin Cerco, fue un ejercicio tan difícil de resistencia y sobrevivencia como lo fue durante estos últimos quince meses. Debimos aprender a rebuscar, aún por debajo de las capas de recursos que habíamos aprendido a explorar, para maniobrar en un escenario concentrado por grandes alimañas monopólicas. Hoy lo nuestro parece pertenecerles y su privilegio propietario queda oficializado con decretos y normativas. Ahora también somos indicio de esa fatalidad: quienes deben decir lo que se niega metódicamente desde la institucionalidad. Un acto del decir que es, además, una actitud que implica la mostración de lo que pasa y obliga a una elaboración. No es posible quedarse con la seria objetividad de los analistas ni con los breves añadidos de los datólogos empecinados en reducir toda complejidad a la vislumbre de una cifra todopoderosa.
La muestra fotográfica, la exhibición seriada de fragmentos de realidad, pizcas pictóricas de las intensidades de una agitación que vivifica causalidades históricas, recicla rostros y posturas, abre surcos y deja salir todas las furias acumuladas. Pero también los amores cuando entran en sintonía, las épicas de la solidaridad y el encuentro. Los lazos fortuitos y poderosos de las luchas por la dignidad. La mención imposible y el acto indefinible de la justicia.
Es posible que esta muestra no sea un resumen, ni siquiera una criteriosa aproximación. Es, más bien, un nuevo gesto de producción, un ensayo por esos modos aún inaccesibles de interferir en las secuencias del orden modernizado. Alumbramientos vitales de las ruinas y mínimas heroicidades que nos fueron forjando durante el último año y medio. Pedazos de piel de un trabajo colectivo y del empeño gozoso y sufrido de hacer un periodismo popular y convencido en defensa de los derechos humanos y la lucha contra la injusticia.»