En el primer semestre de 2016, Reporteros sin Fronteras (RSF) registró 21 casos de periodistas asesinados en América Latina, 14 de ellos en México y Guatemala. Un balance desastroso que se explica por la falta de mecanismos de protección o por las deficiencias de estos, pero sobre todo, por el alarmante grado de violencia, corrupción e impunidad en la mayoría de los países de la zona, que se ha convertido en una de las más peligrosas del mundo para el ejercicio de la profesión periodística.
Desde el 1 de enero de 2016, 20 periodistas han sido asesinados en América Latina. Como en 2015, México sigue estando a la cabeza de esta triste lista, con 9 asesinatos. Le siguen Guatemala (5), Honduras (3), Brasil (2), Venezuela (1) y El Salvador (1).
Ninguno de estos países se encuentra oficialmente en guerra. No obstante, estos padecen una fuerte violencia estructural, relacionada en parte con la omnipresencia de grupos armados, como los cárteles en México o las pandillas de Maras en América Central. En la mayoría de los casos registrados (mencionados abajo), aún se desconoce con exactitud cuál fue el móvil del crimen*. A menudo las investigaciones judiciales –cuando se abren– se estancan o se ven obstaculizadas por autoridades corruptas. Más que nunca, la impunidad de estos crímenes sigue estando en el centro de un círculo vicioso y de una desvalorización permanente de la profesión periodística.
El contexto en el que ocurren estos asesinatos suele ser muy similar: se trata de regiones alejadas de las grandes ciudades y de periodistas –a menudo locutores de radio o corresponsales locales– que cubren temas locales judiciales, sociales o relacionados con el crimen organizado y la corrupción, que son asesinados por sicarios en la calle, cerca de su domicilio o de su trabajo. En ocasiones las víctimas ya habían denunciado haber recibido amenazas tras realizar investigaciones o después de difundir o publicar información.
Cuando se cierne la duda, las autoridades policíacas y judiciales descartan lo más rápidamente posible que el móvil del crimen esté relacionado con la profesión de la víctima, ponen en tela de juicio la calidad de su trabajo periodístico e incluso pueden decir que existían nexos entre la víctima y grupos criminales locales.
«Este balance de asesinatos de periodistas realizado a mediados de año augura que 2016 será un año terrible en América Latina”, señaló Emmanuel Colombié, responsable del Despacho América Latina de Reporteros sin Fronteras. “Esta oleada de violencia en el continente, particularmente en México y América Central, ha hecho que esta región se encuentre entre las más peligrosas del mundo para ejercer la profesión periodística. Si a esto se suman las innumerables agresiones, los secuestros, las desapariciones forzadas, las amenazas y los casos de hostigamiento judicial, podrá constatarse el clima de terror que viven los periodistas y en el que, evidentemente, estos no tienen cabida. Ante este sombrío balance, es muy importante que los dirigentes de la zona tomen consciencia de su responsabilidad y hagan su mayor esfuerzo para parar esta espiral mortífera”, añadió.
Recordemos lo que contempla la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos (OEA): «El asesinato, secuestro, intimidación, amenaza a los comunicadores sociales, así como la destrucción material de los medios de comunicación, viola los derechos fundamentales de las personas y coarta severamente la libertad de expresión. Es deber de los Estados prevenir e investigar estos hechos, sancionar a sus autores y asegurar a las víctimas una reparación adecuada”.
Algunos Estados de la OEA parecen haber olvidado estos principios, pues aún no consideran la protección de periodistas una prioridad. Así, en toda la zona, sólo Colombia y México han puesto en marcha mecanismos nacionales de protección. Estos dispositivos, si bien tienen el mérito de haber sido creados, no logran cumplir su función principal y carecen de recursos financieros, humanos, así como de independencia frente al poder político. En Guatemala, bajo la fuerte presión de organizaciones de la sociedad civil y de asociaciones de periodistas, se está elaborando un mecanismo. En Honduras, frente a la impunidad casi total de los crímenes cometidos contra periodistas, RSF incita a la creación de un organismo independiente de investigación, competente, con personal bien capacitado y calificado, que pueda identificar claramente si existe una relación entre el asesinato de los periodistas y su actividad profesional, y darla a conocer públicamente.
Balance hasta el 1 de julio de 2016:
México, lugar 149 en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2016 de RSF: 9 víctimas.
– Marcos Hernández Bautista, 38 años, asesinado el 21 de enero de 2016, estado de Oaxaca.
Medio de comunicación: diario Noticias Voz e Imagen.
– Reinel Martínez Cerqueda, 43 años, asesinado el 22 de enero de 2016, estado de Oaxaca.
Medio de comunicación: radio comunitaria El Manantial.
– Anabel Flores Salazar, 32 años, asesinada el 9 de febrero de 2016, estado de Veracruz.
Medio de comunicación: diario El Sol de Orizaba.
– Moisés Dagdug Lutzow, 65 años, asesinado el 20 de febrero de 2016, estado de Tabasco.
Medio de comunicación: director del grupo de medios de
comunicaciónVX.
– Francisco Pacheco Beltrán, 55 años, asesinado el 25 de abril de 2016, estado de Guerrero.
Medio de comunicación: diario El Sol de Acapulco.
– Manuel Santiago Torres González, 48 años, asesinado el 14 de mayo de 2016, estado de Veracruz.
Medios de comunicación: sitio web Noticias MT y TV Azteca.
– Elidio Ramos Zárate, 44 años, asesinado el 19 de junio de 2016, estado de Oaxaca.
Medio de comunicación: El Sur.
– Zamira Esther Bautista, 44 años, asesinada el 20 de junio de 2016, estado de Tamaulipas.
Medios de comunicación: freelance, El Mercurio y La Verdad.
– Salvador García Olmos, 31 años, asesinado el 29 de junio de 2016, estado de Oaxaca.
Medio de comunicación: radio comunitaria Tu un Ñuu Savi.
Guatemala, lugar 121 en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2016 de RSF: 5 víctimas.
– Mario Roberto Salazar, 32 años, asesinado el 17 de marzo de 2016, departamento de Jutiapa.
Medio de comunicación: director de la radio Estéreo Azúcar.
– Wiston Leonardo Cano Túnchez,
41 años, asesinado el 8 de abril de 2016, departamento de Escuintla.
Medio de comunicación: locutor de Radio La Jefa.
– Diego Salomón Esteban Gaspar, 22 años, asesinado el 30 de abril de 2016, departamento de Quiché.
Medio de comunicación: Radio Sembrador.
– Víctor Hugo Valdez Cardona, 65 años, asesinado el 7 de junio de 2016, departamento de Chiquimula.
Medio de comunicación: conductor de Chiquimula Visión.
– Álvaro Alfredo Aceituno López, 65 años, asesinado el 25 de junio de 2016, departamento de Quetzaltenango.
Medio de comunicación: director de Estéreo Ilusión.
Honduras, lugar 137 en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2016 de RSF: 3 víctimas.
– Marlon David Martínez Caballero ,27 años, asesinado el 7 de febrero de 2016, departamento de Cortés.
Medio de comunicación: locutor de la radio TopMusic.
– Dorian Hernández, 27 años, asesinado el 16 de junio de 2016, departamento de Lempira.
Medios de comunicación: fotógrafo freelance y ex productor de GRT Canal 31.
– Elmer Cruz, 30 años, asesinado el 19 de junio de 2016, departamento de Yoro.
Medio de comunicación: conductor de un programa musical de un canal local.
Brasil, lugar 104 en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2016 de RSF: 2 víctimas.
– João Valdecir de Borba, 51 años, asesinado el 10 de marzo de 2016, estado de Paraná.
Medio de comunicación: locutor de Radio Difusora AM.
– Manoel Messias Pereira, 46 años, asesinado el 9 de abril de 2016, estado de Maranhão.
Medio de comunicación: bloguero, Sediverte.com
Venezuela, lugar 139 en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2016 de RSF: 1 víctima.
– Ricardo Durán Trujillo, 45 años, asesinado el 19 de enero, Caracas
Medio de comunicación: jefe de prensa del Gobierno del Distrito Capital
El Salvador, lugar 58 en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2016 de RSF: 1 víctima.
– Nicolás Humberto García, 23 años, asesinado el 10 de marzo de 2016, departamento de Ahuachapán.
Medio de comunicación: locutor de la radio comunitaria Expresa, Voces al Aire.
*Precisión: RSF no pudo incluir en su recuento oficial todos los asesinatos de los que tuvo conocimiento, debido a que hubo casos en los que no obtuvo información suficientemente clara de las investigaciones locales sobre si existe un nexo entre el asesinato y el trabajo periodístico de la víctima. El recuento oficial se usa para elaborar el Barómetro de la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa.