Familiares y amigos del joven desaparecido y hallado sin vida en el río Paraná marcharán este jueves junto a organizaciones sociales, políticas y gremiales exigiendo que se aclaren los hechos. Critican la investigación de la Fiscalía y piden que se apunte a patovicas y policías con servicios adicionales en La Tienda.
Por Martín Stoianovich
Mientras pasan los días y la incertidumbre continúa, los familiares y compañeros de Pichón Escobar comienzan a organizarse. A la espera de que se esclarezcan los hechos que giran en torno a la desaparición y muerte del pibe de 23 años, durante este lunes se realizó una convocatoria multisectorial de la que participó la familia junto a organizaciones sociales, políticas y gremiales. El fin es lograr, a través de una gran movilización, que se agilice la investigación por parte de la Fiscalía. Realizarán una conferencia de prensa este jueves 27 de agosto a las 10 de la mañana en la puerta Tribunales Provinciales y el mismo día por la tarde, a las 17.30, una movilización desde la Fiscalía de Homicidios (Montevideo y Alvear), hasta la sede de Gobernación (Santa Fe 1950).
En la semana y media que lleva transcurrido el caso Escobar, se despertaron muchas dudas a raíz de las pocas certezas desprendidas de la investigación. Primero a cargo del fiscal Lucas Altare cuando a través de una serie de medidas tomadas entre allanamientos, algunos testimonios y material de viodeocámaras, no se consiguieron datos sustanciales. Luego, a través de la intervención del Servicio Público Provincial de la Defensa Penal, la familia accedió al material recolectado por los fiscales y pudo dar su mirada del hecho. El testimonio del colectivero que asegura haber transportado a Pichón fue desestimado por la familia y los pocos minutos de videocámara aportados por el boliche La Tienda posibilitaron que se despierten las sospechas detrás de la desaparición del joven. Sospechas que incrementaron luego de que el pasado viernes el chico fuera hallado sin vida flotando en las aguas del Paraná.
El mismo viernes por la noche, en el Instituto Médico Legal, se realizó la autopsia del cadáver y se abrió un debate que gira en torno a las dos hipótesis posibles sobre el hecho. Según el informe publicado por la Fiscalía “del examen externo efectuado no surgen signos compatibles con heridas de armas de fuego o heridas por arma blanca, ni heridas contusotraumáticas”, ni otro tipo de marca importante que suponga una situación de violencia. Desde el viernes, interviene la fiscal de homicidios Marisol Fabbro, quien hasta el momento se sujeta a este informe, más cercano a la hipótesis de que el joven murió por ahogamiento al caer al río. Sin embargo, el médico de parte de la Defensoría, Victor Moglia, presente en la autopsia, afirmó públicamente que el cuerpo presentaba “hematomas en la zona del hígado y una deformación anatómica en la zona genital, es decir, en los testículos y el pene, que podría deberse a golpes”. Mientras tanto, se espera que se avance con nuevos estudios para determinar la causa de la muerte y develar por lo menos si el joven estaba con vida al momento de hacer contacto con el río.
La familia Escobar acompaña la idea de que detrás de la muerte de Pichón hay responsables. Su tío Rubén vio el cadáver y confirma que su sobrino estaba golpeado. Pero además crecen muchas sospechas sobre el accionar de los patovicas en la noche de la desaparición del chico. Las cámaras de seguridad muestran que aquella noche, al salir Pichón del boliche La Tienda, un grupo de patovicas se dirigió hacia el mismo lugar. Luego una serie de gestos por parte de dos mujeres espectadoras,dan indicios claros de que algo estaba ocurriendo. Un agregado es el celular de Pichón detectado por una aplicación digital en inmediaciones de la casa de uno de los patovicas que ya tomó declaración a la Fiscalía y fue desligado por el momento. Toda la sospecha de la familia Escobar se fundamenta en el historial reciente del boliche La Tienda: denuncias por violencia ejercida por parte de los patovicas y policías con servicios de adicionales, y las menciones públicas que vinculan al lugar con la venta de drogas, su no habilitación para abrir sus puertas hasta altas horas de la madrugada y su permanencia constante en la noche rosarina a pesar de ello.
“Como familiares y amigos sabemos muy bien que mi hermano no se pudo haber tirado, y queremos justicia. Vamos a hacer lo posible para que esto pase. Yo voy a estar presente donde sea. Yo sé que voy a seguir adelante, se lo prometí a mi hermano”, comentó ayer Luciana Escobar. Por otro lado, dejó en claro que la familia no dará por sentada la causa de la muerte de Pichón en tanto el hecho no se esclarezca con pruebas fehacientes. “Si en algún momento se llega a comprobar que mi hermano se tiró, que puede pasar, yo saldré a decir que ya está. Pero en el fondo sé muy bien que no se tiró, tenía una vida por delante. Como hermana yo voy a hacer todo lo que sea necesario, y voy a ir contra quienes tenga que ir”, aseguró.
En esta misma línea y acompañando a la familia y amigos de Pichón, se posicionan organizaciones sociales, políticas y gremiales que se convocaron en la multisectorial que planifica la movilización del próximo jueves. Allí asistió Elsa Godoy, mamá de Franco Casco, desaparecido y hallado sin vida en el río Paraná luego de haber estado detenido en la Comisaría 7ma. “Esto tiene que cambiar, la justicia está para cuidarnos y no para que nos maten”, pronunció Elsa momentos después de unirse en un cálido abrazo con la familia de Pichón. Sus lágrimas dejan al descubierto la solidaridad de una mujer que atravesó el mismo calvario hace menos de un año. Cuando Franco Casco no aparecía, desde la Fiscalía le daban fuerza al testimonio que decía haber visto al chico mendigando en una capilla. Cuando fue hallado sin vida en el río, se inclinaban por la idea de suicidio o accidente vinculado al “desacato” sostenido por la investigación de los fiscales desde un primer momento. Las mentiras y los silencios abundaron hasta que la causa pasó al fuero federal y hoy se espera la indagatoria del personal policial de la Comisaría 7ma.
Desde la multisectorial se avanzó con la idea de movilizar desde la Fiscalía de Homicidios para exigir el esclarecimiento del hecho, hasta la sede de Gobernación para dejar en claro que la postura de responsabilidad estatal detrás de la muerte de Pichón no sólo pertenece a un funcionario público. Vale recordar que días atrás la Fiscalía salió al cruce del Defensor General Gabriel Ganón por decir públicamente que deben ser investigadas las responsabilidades de los patovicas y policías de La Tienda.
Sobre la investigación, desde la Fiscalía informaron que no hay avances recientes más que el acceso a nuevo material de cámaras de seguridad, y la nueva toma de declaraciones a personas que ya dieron testimonios días atrás. Las organizaciones allegadas a la familia Escobar la acompañan en el repudio a los fiscales por detenerse en detalles que dan a entender que Pichón se encontraba alcoholizado, considerando que de esa manera se intenta desviar el foco del hecho, que está en la desaparición del joven en el oscuro boliche La Tienda. Por fuera de las acusaciones entre funcionarios públicos, el esclarecimiento del hecho es un derecho fundamental para la familia Escobar.
Invitación a la movilización: Facebook