Para comprar directamente a los productores
El 13 de julio quedará inaugurado el nuevo Mercado Popular que gestiona la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (Ctep). Tendrá lugar en el Centro Cultural La Toma, simbólico espacio de lucha y autogestión y funcionará todos los días, de 8 a 21 hs. Se podrán adquirir productos, sin intermediarios y a precios populares, que también pueden encontrarse en las ferias itinerantes del Camión de la Economía Popular. Una batalla más contra el mercado concentrado, promoviendo otro consumo y otra manera de producción.
Por María Cruz Ciarniello
Un nuevo emprendimiento se incorpora al Centro Cultural La Toma. Desde hace 14 años, este espacio enclavado en el centro rosarino, es un ejemplo de resistencia. Más de 30 organizaciones sociales construyen un vecindario de solidaridad. Dicen que la unión hace a la fuerza y es esta la imagen más nítida de lo que se percibe apenas se cruza el umbral.
En este mismo lugar funcionaba el Supermercado Tigre. Ante un vaciamiento de la patronal y quiebra fraudulenta en pleno 2001, los trabajadores fueron quienes decidieron recuperar la fuente de su ingreso, ocupando el espacio para luego ponerlo en funcionamiento. Hoy, y a pesar de contar con dos leyes provinciales de expropiación que el poder judicial considera inconstitucional, la vida en la Toma es constante. Y es a partir del movimiento, del ir y venir permanente de vecinos, militantes sociales, jóvenes estudiantes, actores, productores y laburantes, cómo logra seguir en pie aunque el desalojo sea la perversa amenaza que se perpetúa en el tiempo.
La Toma, además de albergar a 30 organizaciones sociales (derechos humanos, teatro, cooperativas, género, economía social), cuenta con un bar a precios populares, locales de la Subsecretaría de Economía Social de la Municipalidad, y un almacén que desde el 13 de julio se verá potenciado con la presencia de los puestos de productos elaborados por la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP Rosario).
Es que el Mercado Popular que hasta el momento solo era itinerante a través de las ferias ambulantes del Camión de la Economía Popular, ahora será parte del Centro Cultural La Toma. Un espacio que además de fortalecer la resistencia de este lugar que promueve la autogestión, posibilitará poder comprar directamente a productores de la Economía Social que comercializan sus producciones a un precio justo. “Una nueva forma de comprar”, anuncian con entusiasmo desde la Ctep. Así promueven lo que será este nuevo Mercado Popular de Rosario donde, por ejemplo, el kilo de pan costará solo 10 pesos y un kilo de ravioles a 45 mientras el precio promedio ronda los 80 pesos.
Fortificar otro tipo de economía no solo es posible sino que es, ante todo, una realidad tangible. Así lo venimos diciendo desde nuestro medio de comunicación, dando cuenta de las diversas experiencias autogestivas que promueven la Economía Social, desde el consumo responsable, la comercialización a través de cooperativas y la producción agroecológica u orgánica, sin contaminantes y siguiendo criterios solidarios.
Panificados, verduras orgánicas, frutas de estación, huevos de campo, pizzas y pastas caseras, productos dietéticos, semillas, granos, harinas integrales, aceite de oliva, aceitunas, vinos y mucho más serán algunas de todas estas producciones que se sumarán al almacén que ya tiene en funcionamiento el Centro Cultural La Toma. “Doce unidades productivas van a estar trabajando”, remarcan desde la Ctep.
“Para nosotros es importantísimo la apertura del Mercado Popular, primero porque este lugar está al servicio de productores que tienen un espacio de comercialización directo sin ceder a la especulación y las remarcaciones, y por el otro lado, porque como trabajadores ayudamos a una política que tiende a contrarrestar el robo que hace un puñado de remarcadores que monopolizan el comercio minorista en el país y acá en Rosario”, señala Carlos Ghioldi, presidente de la Cooperativa de Trabajadores Solidarios en Lucha.
Acaba de finalizar la asamblea que realizan todas las organizaciones que allí conviven. Desde la semana pasada también participa la Ctep quien ya está poniendo a punto el espacio en el que el próximo 13 de julio se levantará el Mercado Popular. “Es parte de esta lucha y ayudamos a compañeros que están en la misma situación y ponemos una vez más en práctica nuestra consigna: mientras la Toma sea la casa de los trabajadores será la casa de todos aquellos trabajadores que luchan por un mundo más justo y estará al servicio de todas las organizaciones populares”, vuelve a decir Ghioldi, con la efusividad que es parte de sus palabras y de su lucha en defensa del lugar.
Tiempo atrás, y en una entrevista para enREDando, Carlos confesaba que dormía con el celular encendido bajo la almohada. En ese entonces, decía: “uno no puede evitarlo, está sujeto a esa situación, tener un desalojo desde el año 2001 que dice que el lugar debe ser desalojado, no dice cuando ni en qué tiempo, pero no hay ninguna ley que deja sin efecto ese desalojo”. La realidad no cambió demasiado. Lo que sí perduró durante estos largos 14 años fue la ocupación de diversas organizaciones sociales que, con la presencia activa y la lucha militante, defienden el espacio ante el embate de intereses empresarios.
“De acá no nos vamos a mover”, dice Ghioldi cada vez que esa amenaza vuelve a reflotar. Sabe que ni él ni sus compañeros de la cooperativa están solos. En La Toma circula gente todo el tiempo. El fileteado del bar le dá la bienvenida a las partidas de truco de los jubilados, al almuerzo de los estudiantes, a las reuniones de los militantes. Y también, al consumo responsable que le hace frente a la especulación y la remarcación de precios que hacen las grandes cadenas de supermercados. “Las 30 organizaciones que estamos acá bancamos y apoyamos para que este emprendimiento avance y funcione, porque también es un acto de defensa como trabajadores que también somos consumidores, porque somos las víctimas de las estafas de los empresarios. No podemos seguir siendo rehenes de un puñado de empresarios y redistribuidores que en el 2013 llenaron galpones con mercadería que después vendían remarcando aun 500 por ciento. Eso es un robo, y es una desestabilización no solo contra un gobierno, sino contra el propio pueblo.”
En una entrevista realizada por el programa radial del periódico El Eslabón, Noticias Piratas, Celcio Moliné, militante de la CTEP y el Movimiento Evita contaba sobre el sentido de este nuevo espacio que se suma a La Toma: “las ferias se van a transformar en un mercado popular para darle mayor nivel de organización para que quienes no pueden acceder a las ferias, tengan lugar para ir a comprar productos a precios populares, porque en el trasfondo peleamos por eso, para que haya mayor igualdad para adquirir los productos y no toda la concentración en los grandes supermercados que remarcan los precios”.
Las ferias de la economía popular nacen hace un año, a partir de la propuesta del Camión de la Economia Popular que de manera itinerante, recorre distintos puntos de la ciudad para ofrecer productos a precios accesibles y justos. “Uno de nuestros objetivos era establecernos en un lugar para dar una batalla más concreta, y ese nivel de organización hizo que nos reuniéramos en la Toma que tiene un significado simbólico por la lucha de sus trabajadores,” explica Celcio. Es decir, el Mercado Popular será un espacio fijo que se suma a los puestos de venta que van transitando por la ciudad y cuyo cronograma puede consultarse en el Facebook del Camión de la Economía Popular.
¿Por qué comprar en el Mercado Popular? Desde la Ctep argumentan: es una apuesta importante para ayudar a romper la lógica de las grandes cadenas que remarcan los precios hasta un 300% y porque se contribuye a crear una nueva forma de comprar y vender, con una idea que trasciende la mera ganancia. El contacto directo con el productor y el conocimiento sobre el proceso de producción del alimento son dos principios fundamentales.
Este 13 de julio, dicen, será yeta para las grandes cadenas de supermercados. La apertura del mercado popular, que funcionará de lunes a viernes de 8 a 21 hs, así lo preanuncia. Y lo hará en un lugar donde funcionó anteriormente una cadena de supermercados con patrones que impedían la formación de delegados gremiales. Allí, hoy hay un “monumento a la solidaridad”, como bautizó a la Toma, una Madre de la Plaza 25 de Mayo. “Este espacio es plural. Entendemos que este es el gran desafío del lugar. Ocupamos el establecimiento, lo pusimos en funcionamiento en manos obreras, y al ponerlo en funcionamiento no lo hicimos siguiendo criterios de lucro, sino un criterio de solidaridad. Esa es la lucha y por eso invitamos el 13 de julio a la inauguración de los puestos de la Ctep”, concluye Carlos Ghioldi.
Centro Cultural La Toma está ubicado en Tucumán 1349
5 comentario
Apoyo cálidamente la gesta, fiel consumidora vecina en años atrás.
Saludos
muy buena iniciativa….
EXCELENTE PROYECTO CONCRETADO!! SEGURAMENTE SERÁ APOYADO POR TODOS LOS ROSARINOS Y DE OTRAS LOCALIDADES CERCANAS, CANSADOS DEL REMARCADO Y OTROS ABUSOS. GRACIAS A LOS QUE SE EMBARCARON EN ESTE ESFUERZO PARA BENEFICIARNOS.¡LES DESEO LO MEJOR !¡ Y ASÍ SERÁ! (soy rosarina viviendo en Pueblo Esther).
Muy buena noticia , felicitaciones por el logro a todos ustedes que lo idearon y a los trabajadores que lo hicieron posible . Soy rosarino viviendo en Sta Rosa de Calamuchita y como militante de las causas populares les doy mi apoyo total
Excelente, muy buena forma de generar nuevas oportunidades.
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