Por Equipo de Comunicación CTA Rosario | Mujeres de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) Regional Rosario junto a las Secretarías de Género de CTA Rosario y Provincial, solicitan la sanción de la Licencia por Violencia de Género para las trabajadoras y trabajadores del estado.
Una semana atrás, las mujeres organizadas de ATE y CTA mantuvieron un encuentro con la Directora Provincial de Políticas de Género, Mercedes Martorell, donde hicieron entrega de una iniciativa impulsada desde ATE para que se contemple una Licencia de Violencia de Género en la administración pública provincial y municipal.
La iniciativa propone la modificación de los regímenes de licencia, justificaciones y franquicias mediante un artículo que establezca que “en los casos en los que la empleada o empleado público, víctima de violencia de géneros deba ausentarse por tal motivo de su puesto de trabajo, esta inasistencia sea total o parcial, contará con la debida, justificación emitida por los servicios de atención y asistencia a las víctimas de violencia de géneros, los que evaluarán las condiciones y tiempo de la referida licencia”.
A continuación, compartimos la nota de Rodrigo Arévalo publicada en el Diario El Ciudadano, donde son entrevistadas las referentes de las Secretarías de Género de nuestra Central.
Avanzan las licencias por maltrato
La problemática de la violencia de género afecta a la sociedad argentina y muchas veces es vista como algo normal, incluso por sus propias víctimas. Esto lleva a un “vacío legal y reglamentario en el marco laboral”, según manifestaron las secretarias de Género de la CTA de Rosario y la CTA provincial, María José Gerez y Liliana Leyes, quienes junto a mujeres de otros gremios ya tomaron nota. Por eso, el martes pasado, las dirigentes gremiales se reunieron con la directora de Políticas de Género de Santa Fe, Mercedes Martorell, a quien le entregaron una iniciativa impulsada desde la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), la cual contempla un régimen de licencias por violencia de género.
Las responsables del área en la CTA dialogaron con El Ciudadano y ambas coincidieron en la importancia que tiene este proyecto, ya que actualmente “las trabajadoras que son víctimas de violencia de género y deben ausentarse de su lugar de trabajo recurren a una licencia psiquiátrica, lo cual es estigmatizante”, según indicó Gerez.
“Es importante poder enmarcar legalmente la situación real de la violencia de género, la cual muchas veces es considerada como un problema personal o de salud. Si el proyecto es reglamentado por los distintos ministerios de la provincia, se habilitarán las licencias que pueden ser totales o parciales en función de lo que se evalúe”, agregó la secretaria de Género de la CTA de Rosario.
Por su parte, Leyes afirmó que es “muy beneficioso” que las trabajadoras puedan expresar su idea. “Ahora son los ministerios los que deben tener el compromiso y la responsabilidad de tomarlo”, se esperanzó y aseguró que confía en el trabajo que llegará adelante Martorell para “justificar la iniciativa ante los ministerios”.
Las secretarías de la central obrera serían las encargadas de entregar las licencias, evaluando cada situación en particular, para determinar si la víctima debe ausentarse del trabajo por completo, parcialmente o cambiar el horario.
Hasta el momento, estas cuestiones se trataban en paritarias, cada sindicato de manera individual. Pero de esa manera ocupaba un lugar menor en la discusión, según señalaron las trabajadoras.
Otro de los problemas con los que cuentan los gremios es la falta de registros de casos de violencia doméstica. Según explicaron Gerez y Leyes, la iniciativa contempla esta cuestión, creando un observatorio y un registro, ya que hasta el momento, “la única referencia que se tiene es por los medios de comunicación”.
Según el improvisado recuento, en 2013 hubo 26 víctimas de femicidio en la provincia de Santa Fe y muchos de esos casos figuran como accidentes.
De aprobarse el proyecto, sería el segundo en Argentina. Leyes recordó que, el año pasado, una reglamentación similar tuvo lugar en Chubut. Además, hay muy pocos en el mundo, ya que solamente existe en Austria y en los estados (provincias) norteamericanos de Washington y Kansas.
“En nuestro país hay un vacío de políticas públicas en todos los ministerios. Hay una ley, pero no hay voluntad política de que se cumpla”, señaló Leyes. Mientras que por su parte, Gerez ejemplificó: “Cada vez que se me acerca una trabajadora a plantearme su situación, se dificulta que el Estado, en todos sus niveles, la reconozca. El Estado tendría que destinar un presupuesto que refuerce el existente para políticas de género y nada de eso se está viendo”.
“Todavía queda mucho por hacer y por eso seguimos reclamando, saliendo a las calles para visibilizar la problemática, que lamentablemente es algo bastante común”, cerró Gerez.
“Lo vivimos a diario”
El proyecto nació por iniciativa de ATE y rápidamente fue impulsado por el resto de los gremios nucleados en la CTA. Según las secretarias de Género de la central obrera, el desencadenante fue que “una compañera fue llevada al trabajo del brazo de su mamá y su hija, totalmente atontada por la medicación que estaba tomando, recetada por un psiquiatra. Al respecto, Gerez afirmó: “Son cuestiones graves que nos atraviesan todos los días y debemos seguir reclamando para tener todos esos derechos, no podemos bajar los brazos en esta lucha”.
“Estas situaciones las vivimos a diario, fue la misma práctica la que llevó a este reclamo”, manifestó Leyes. Y agregó: “Ser mujer no tiene fronteras, partidos políticos ni organizaciones sociales. Somos mujeres y merecemos este derecho”.
Foto: Juan José García, El Ciudadano
Equipo de Comunicación CTA Rosario