Registros de una larga lucha
Néstor Elías, periodista de FM La Tribu de Buenos Aires, estuvo en Rosario presentando su segundo libro “Algunos registros de la Lucha Q´om” junto al Qarashe Félix Díaz y representantes de las comunidades originarias de Rosario. Su libro aborda el extenso reclamo de la Comunidad La Primavera de Formosa, además de profundizar en debates de los que no muchos hablan: la disputa de los territorios y la matriz sobre la cual se creó el Estado Argentino. Allí estuvo enREDando.
El libro de Néstor Elías nos invita a repensar los cimientos sobre los cuales habitamos.
Sus escritos trazan una trayectoria vital: la histórica lucha del pueblo Qom. Sin delimitar fronteras, aunque las geografías marquen sus diferencias, Elías registra palabras y conversaciones de lo que no trasciende. Lo que en silencio perdura, aferrado a la defensa de lo único que se tiene como fuente de vida: la propia tierra.
En su paso por Rosario, la Casita de la Memoria abrazó al militante y periodista de la radio comunitaria La Tribu, a Ofelia Morales, dirigente qom de la ciudad, y además, al referente de la Comunidad Qom Potae Napocna Navogoh La Primavera de Formosa, Félix Díaz, quien durante tres días visitó comunidades originarias radicadas en la ciudad y acompañó a los referentes de comunidades qom, mocoví y coya de Rosario en sus reclamos ante la municipalidad y el gobierno provincial, entre ellos: la creación de una Secretaría de Pueblos Originarios en Rosario, la incorporación de promotores bilingües en los centros de salud y hospitales y escrituración de terrenos de las comunidades.
El libro: un acto de coraje
La figura de Félix Díaz es reconocida a nivel internacional. Cuando apenas su voz comenzaba a escucharse, muchos otros ya lo conocían. Más allá de cierta prensa oportunista y devenida pro indigenista que por conveniencia hoy se hace eco -en parte- de estos reclamos, la lucha indígena tiene una extensa historia atravesada por múltiples complejidades y relaciones que dan cuenta de la disputa del territorio y de los vínculos con los Estados Nacionales.
– Hay que discutir la matriz sobre la cual se construyó el Estado Argentino-, señala Elías, remarcando aquello de lo que no se habla. Sus registros, y su libro recientemente publicado, profundiza en estos debates, intentando echar luz a una lucha localizada en la provincia de Formosa, pero que se repite como postal en muchas otras.
Desde hace más de 14 años, Néstor Elías recorre tierras qom. “Este libro viene a completar el primero que es un trabajo de campo muy extenso, y decidimos por cuestiones editoriales concentrarnos en el Impenetrable Chaqueño y en aspectos que tienen que ver con la cultura qom, aunque en ningún momento dejamos de lado, denunciar y enmarcar cuál era la situación que estaban atravesando.” En ese primer libro, Los Pies en el barrio, Diálogos en el Pueblo Qom, el foco se concentró en la cultura más pura que se puede rescatar en los territorios y a los cuales Elías conocía, a partir de sus recurrentes viajes al Chaco.
En este segundo libro, Algunos registros de la Lucha Q´om, el periodista reabre nuevos diálogos y profundiza en el extenso reclamo que lleva adelante la Comunidad La Primavera en Formosa.
– El libro hace eje en estos últimos 3 años de la lucha qom, a partir de la llegada de la comunidad la Primavera a Buenos Aires, de Félix Díaz puntualmente y de lo que tiene que ver en lo que yo creo es un antes y un después de la lucha qom, por la visibilización enorme que fue tomando a lo largo de este tiempo y porque a partir de allí surgió un emergente social que no estaba contemplado para la lucha indigenista que es Félix Diaz, entonces, este libro surge como complementario al anterior, aunque es abarcativo a todas las problemáticas de las comunidades que habitan en la Argentina.- señala Elías, mientras charlamos en la sede de la Casita de la Memoria en Rosario.
El prólogo del libro está a cargo del maestro Osvaldo Bayer. Es una “historia del agravio, del crimen y del despojo de sus tierras”, refiere el historiador en un documento que se presenta como un invalorable aporte a la historización de un reclamo fundamental por las tierras en la provincia de Formosa, gobernada desde el año 1995 por Gildo Insfrán.
Le preguntamos a Néstor qué diferencias encuentra entre éste libro y el anterior, realizado en el Chaco. En realidad -señala- habría que preguntarse qué no tienen en común estas historias. Cuáles son los filamentos que unen realidades no tan lejanas, ni tan distantes.
Elías pregunta: “¿Podríamos encontrar alguna diferencia entre algunas comunidades y otras? Yo creo que no. La única diferencia puede ser, que el modelo político de la provincia del Chaco tuvo alternancias y aunque no se modificó nada, ha habido un poco más de escucha a las comunidades, y las comunidades que están en Formosa sufren la sordera oficial”.
El libro de Néstor Elías presenta 3 partes: la primera cubre notas periodísticas que el autor fue publicando en distintos medios. “Al ponerlas cronológicamente permite ir entendiendo como se fue moviendo el escenario desde que Félix Diaz llega por primera vez a Buenos Aires, a partir de la represión del 1 de noviembre de 2010 y como fueron dándose las respuestas y los esquives que ha recibido de los sectores oficiales, los acercamientos de las organizaciones sociales. Algunas de esas notas fueron de las más leídas en Internet y decidimos ponerlas organizadamente en un libro.”
La segunda parte son las entrevistas y extensos diálogos que Elías mantuvo con el líder de la Comunidad Qom Potae Napocna Navogoh, Félix Díaz, desde finales de 2010 a la fecha, en Fm Radio La Tribu. “Es la palabra testimonial de Feliz Diaz puntualmente ante cada circunstancia y cada pasa de eso lucha.”
La tercera, presenta la voz de una referente de las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Nora Cortiñas. “Un testimonio enorme y muy valioso de Nora, una de las integrantes de la mesa de garantes. Ha hecho un testimonio desde otro punto de vista que termina cincelando cual es el emergente Félix Diaz, qué está pasando con los qom y qué sucede con un gobierno que no escucha. El libro de alguna forma va contemplando eso, es un material puramente periodístico y testimonial.”
Un libro militante, hecho a pulmón, entre viajes y guisos y editado autogestivamente. Así, Algunos registros de la lucha Q’om pone a la luz el maltrato histórico que han sufrido las comunidades originarias y que actualmente tiene su correlato en muertes y amenazas cotidianas que no siempre trascienden.
Tierras en disputa
En un reciente informe publicado por la Subsecretaría de Agricultura de la Nación “Relevamiento y sistematización de problemas de tierras de los agricultores familiares en Argentina” se detalla que en Argentina existen al menos 9,3 millones de hectáreas de campesinos e indígenas que son pretendidas por el sector privado y estatal.
En la mitad de los casos, las familias campesinas e indígenas sufrieron violencia para que abandonen sus campos y el 64 por ciento de los conflictos comenzó en las últimas dos décadas y tiene relación con el modelo agropecuario. “Sin dudas que (el inicio de las disputas) debe leerse a la luz del cambio e innovación tecnológica y el impacto de la expansión de la frontera agrícola sobre los agricultores familiares”, afirma el estudio publicado por el Ministerio de Agricultura de la Nación. (Ver Nota Página 12, lunes 22 de julio de 2013, Darío Aranda)
Más datos: El NOA concentra la mayor cantidad de conflictos (28,2 por ciento). Le sigue la Patagonia (21,1), NEA (19,8), Centro (19,1) y Cuyo (11,7). Córdoba, Misiones, Santiago del Estero, Neuquén, Corrientes y Jujuy son las de mayores casos. El 43,1 por ciento de los conflictos lleva entre uno y nueve años. El 20,9 por ciento entre diez y diecinueve años. La gran mayoría (77,6 por ciento) de los poseedores viven en el lugar desde hace más de 20 años y están amparados por el derecho veinteañal. De los 857 casos relevados, 278 involucran a pueblos indígenas (32 por ciento). De ese total, sólo el 40 por ciento ya fue relevado en el marco de la Ley 26.160 (norma aprobada en 2006 que frena los desalojos judiciales y ordena un mapeo catastral). El 39 por ciento de los casos (331) se encuentra judicializado y en el 52,3 por ciento de los casos se registraron amenazas y presiones de desalojo. Salta, Jujuy, Santiago del Estero, Misiones, Neuquén y Río Negro encabezan el ranking de amenazas. (Fuente: Nota Página 12, lunes 22 de julio de 2013, Darío Aranda).
En el capítulo 2 de dicho informe se señala que “los problemas de uso y tenencia de la tierra identificados en el capítulo anterior se profundizaron en las últimas décadas, vis a vis los procesos de la transformación socio-estructural que caracterizaron a la Argentina durante el siglo XX, como consecuencia del modelo de agriculturización con expansión de la frontera agropecuaria.”
Karina Bidesaca, una de las autoras del informe sostiene que “los problemas de tierra se han intensificado con el gran crecimiento que registra la mega minería, el desarrollo del turismo y los procesos de patrimonialización. Estos nuevos usos de la tierra tienen su correlato en la aparición de “nuevos propietarios” con títulos inciertos, entregas indiscriminadas de tierras fiscales, cercamientos, desalojo de poseedores ancestrales de campos de cultivo y sus viviendas, destrucción de los canales de riego y pircas milenarias, ausencia de respeto a la propiedad de otros, tala de árboles centenarios, riesgo de contaminación y apropiación de acuíferos subterráneos, incumplimiento de la Ley de Patrimonio Arqueológico y Paleontológico” (Cap 2. , pag 52)
Con respecto a la ley de Emergencia Territorial, la 26.160, sancionada por el Congreso de la Nación en el año 2006, el informe indica -entre otras cosas- que “en muchas provincias la conformación de las estructuras judiciales responden a grupos de interés vinculados a la propiedad de la tierra y al modelo de cultivos intensivos y excluyentes de la Agricultura Familiar, como el modelo sojero que requiere desmontes, uso intensivo de agua y de agro tóxicos, da como resultado que la Ley 26.160 y su prórroga muchas veces no se aplica, o se aplica cuando el despojo ya ha sido consumado.”
Asimismo, señala que “muchos pequeños productores campesinos e indígenas carecen de la titulación de tierras que han poseído durante años; esta irregularidad dada por falta de recursos para acceder a la justicia, normas del siglo pasado (usucapión, sucesiones indivisas, acciones posesorias, código minero, etc.), requieren plantear una modificación cualitativa de los marcos jurídicos aplicables, pero también un compromiso político de modificar las políticas de acceso y democratización del acceso a la información y a los sistemas judiciales que resultan actores principales en el ejercicio de su jurisdicción.”
En otro orden, también explicita “ las dificultades que tiene el Estado Nacional para implementar políticas homogéneas en el abordaje de la problemática de tierras , no sólo por la cantidad de organismos y programas dispersos que ejecutan las políticas públicas vinculadas a la tierra, sino principalmente, por las competencias no delegadas a la Nación por parte de las Provincias, en cuanto ellas conservan las facultades y las estructuras institucionales respecto de los recursos naturales ubicados en sus territorios y específicamente sobre “las tierras”.
El INAI debía finalizar, en el término de tres años luego de promulgada la ley, el relevamiento catastral de tierras según lo establece la ley 26.160 en su artículo tercero. Como esto no se concretó, en el año 2009 se sancionó la prórroga mediante la ley 26.554, que vence el próximo 23 de noviembre de 2013.
Nueva advertencia de Endepa ante el inejecución de la ley
El Equipo Nacional de Pastoral Aborigen realizó en julio de este año una segunda advertencia en relación al incumplimiento de la Ley 26.160. En este mismo informe , que ya es el segundo que elabora la Pastoral, también da cuenta de fuertes críticas hacia el INAI.
“En el año 2009 el I.N.A.I publicó un informe sobre el estado del Programa Nacional de Relevamiento Territorial de Comunidades Indígenas que recién comenzaba a realizarse, a tres años de sancionada la ley 26.160. Esa fue la última información general, pública y oficial, respecto al estado de ejecución del programa. De allí en más abundaron las informaciones fragmentarias, las estimaciones carentes de base estadística real, los ocultamientos y las contradicciones”, reafirman con dureza.
A mediados del año 2011 (época en que se realizó la inspección sobre el I.N.A.I.), sólo se había concluido con el relevamiento de las tierras del 4,22 % de las comunidades del país, según señala el informe.
Al mismo tiempo, Endepa detalla que a 6 años de sancionada la ley, apenas una octava parte del programa ha sido cumplida. En las provincias de más alta conflictividad con las comunidades originarias, como Salta, Jujuy, Formosa, Chaco, y Neuquén, donde se concentra el 65% del total de comunidades indígenas, el programa de relevamiento solo fue cumplido un 4,11%. De 108 comunidades a relevar (según datos del Inai) en la provincia de Chaco, solo 2 de ellas fueron censadas. En Formosa, por ejemplo, ninguna de las 182 comunidades fue relevada hasta el momento. Es decir que, “de acuerdo a los datos que fragmentariamente brindó el INAI, las tareas de relevamiento sólo habrían concluido efectivamente en el 12,48% de las comunidades a relevar (197 comunidades de un total de 1578).”
El informe también incluye un extenso capítulo donde se analiza la utilización de los recursos destinados al programa y al respecto concluye que del total del presupuesto de relevamiento “se ha verificado al menos la utilización del 76,41% del mismo”.
“La tierra y los territorios indígenas no se entienden, no se razonan y no se explican sino los miramos desde los Pueblos Originarios, desde su cultura, su pensamiento, su cosmovisión y su sentimiento y sentir sobre la madre tierra. Para el que mira sin ver desde dentro, es tierra no más, nada le dice nada. La historia hay que escucharla desde adentro para poder entenderla. No hay peor corte de relación cultural cuando se lo mira al otro desde una mirada etnocéntrica”, señala Endepa. En otro punto, remarca con dureza: “La contracara de esta prolongada demora en consolidar la titularidad de los territorios indígenas se encuentra en el elevado número de desalojos, represiones policiales, desconocimiento de los derechos comunitarios y muertos cuyos nombres apenas han recogido los medios de comunicación, y los gobiernos nacional y provinciales han olvidado”.
Del mismo modo, el referente qom Félix Díaz, con vos pausada y precisa, señaló, mientras muchos lo escuchaban en la Casa de la Memoria: “allí está la vida, la espiritualidad, los recursos naturales para el desarrollo de nuestras tareas productivas, artesanías, de nuestra forma de vida”. “Queremos pararnos de igual a igual ante los gobernantes, para lograr el respeto de los derechos humanos como pueblo preexistente, y porque a pesar de que no tenemos recursos, nos une la fuerza común.
Néstor Elías es claro al respecto:
– El Estado Argentino ha sido creado en base a tres premisas fundamentales: masacre de indígenas, desplazamiento y destrato del diferente, como los negros, y por último el apropio de los bienes de esos pueblos preexistentes sobre los cuales se edificó el nuevo estado que todos conocemos, entonces nos debemos un debate sobre eso. Cuando hablamos del campo, la concentración, la política agroexportadora, de la frontera agropecuaria, estamos hablando en definitiva de problemas que están en la base, en la concentración de un poder de quienes se apropiaron de lo que era propio. Con el modelo extractivista esto se potenció a zonas que siempre fueron consideradas pobres, muy desmerecedoras de opinión, las provincias más pobres de la Argentina, y hoy la soja y el turismo 5 estrellas, que es otro motivo de desplazamiento, crece en todos lados, e incluso el petróleo no convencional.
Nombres que duelen
En el mes de enero de 2013, la Red de Investigadores en Genocidio y Política Indígena, presentó ante la Presidenta de la Nación una carta abierta en la que denuncian y detallan cada uno de los hechos de violencia acontecidos en las comunidades originarias, en Chaco y Formosa. Entre ellos pueden citarse los casos de:
Roberto López, asesinado en la represión policial del 23 de noviembre de 2010 en la Comunidad La Primavera de Formosa
Mario López, dirigente pilagá de la Colonia Alberdi y delegado del Mocafor, murió al ser atropellado por un policía cuando se dirigía a expresar su solidaridad con la comunidad La Primavera.
Alberto Galván, jornalero qom perteneciente a la comunidad Paraje El Colchón, cercana a Villa Río Bermejito en Chaco, asesinado a tiros y arrojado a las pirañas el 21 de enero de 2011.
Mártires López, dirigente de la Unión Campesina, muerto el 14 de junio de 2011 en circunstancias dudosas.
Celestina Jara y su nieta Natalia Lila Coyipe de 11 meses, también miembros de la Comunidad La Primavera, muertas el 10 de diciembre de 2012 tras ser atropelladas por un gendarme quien no sólo no las auxilió sino que junto a sus acompañantes golpeó a Ricardo Coyipe, dirigiente qom.
Imer flores, 12 años, de Villa Río Bermejito, asesinado a golpes por una patota el 5 de enero de 2013.
Daniel Asijak, sobrino de Félix Díaz, muerto en circunstancias dudosas mientras circulaba con su moto, el 9 de enero de 2013.
A todos estos casos, se suman situaciones de amenazas y amedrentamiento, además de los crímenes de integrantes de movimientos campesinos como el Cristian Ferreyra y Miguel Galván.
“En la mayoría de los casos se han visto involucrados miembros de las agencias de seguridad estatales” señala la Red. Y todos han sido denunciados, sin embargo, “la reacción de los estados provinciales y de la justicia ha sido dispar, evidenciando lamentablemente en muchos casos una llamativa indiferencia o incluso negligencia respecto a los crímenes cometidos”. En casi todas las situaciones se aplica la misma norma justificativa que repite el poder político, judicial y la policía: las muertes ocurren por accidentes o peleas callejeras.
La Secretaría de Derechos Humanos firmó en abril de este año, y dos años después de la disposición del CIDH, un Protocolo de Seguridad para proteger a la comunidad Qom Potae Napocna Navogoh, obedeciendo a la resolución de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos del 21 de abril de 2011.
Para el periodista y militante Néstor Elías «el gobierno se demoró bastante en implementar estas cuestiones. Y además, agrega, “no hay que soslayar el excesivo racismo que existe en este tipo de provincias: el criollo cercano fogoneado por el poder político local y los medios de comunicación racistas que hay centralizados en la provincia. Comenzaron a ser la mano de obra barata de los punteros políticos y ahí empezaron las golpizas, los disparos, los atropellos.” (Nota en programa radial De Ushuahia a la Quiaca).
Sobre la base de la discriminación y asesinatos impunes a integrantes de comunidades originarias, subyace un reclamo fundamental: la tierra.
– Esto no se discute en los medios masivos, hoy devenidos pro indigenistas. Ellos son parte interesada de muchos de estos emprendimientos, porque muchos de sus dirigentes empresariales forman parte de los pool de siembra, de los mega emprendimientos mineros, simplemente hay que cruzar información y vas a encontrar que gente del grupo Clarin o de otros grupos forma parte de esto. Hay mucha gente involucrada en este tipo de negocios, a sabiendas o no, pero seguramente para todos los casos, los pueblos preexistentes molestan, porque terminan transformando en tierras improductivas tierras productivas, entendiendo lo productivo en términos extractivistas- concluye Néstor Elías en diálogo con enREDando.