A 36 años del saqueo a la Biblioteca Vigil por parte de la dictadura, y tras la restitución, sus directivos apoderados y vecinos/as comenzaron con el largo camino de la recuperación. Lijas y pinceles en mano, los sábados a la mañana le ponen el cuerpo y el corazón al trabajo colectivo de recuperarla por completo, acompañados de música y poesía. El 3 de agosto tocarán Martín Capra (Rosario), Fabián Bret (Córdoba) y José Miel (Buenos Aires). También habrá un esmerado servicio de buffet.
Por Biblioteca Popular C. C. Vigil
En vías de recuperar la biblioteca Constancio Vigil, saqueada por la dictadura Ex directivos y socios de la Biblioteca Popular Constancio Vigil de la ciudad de Rosario, saqueada durante la dictadura militar en 1977, solicitaron al Estado Provincial y Nacional una reparación histórica, que consiste en la restitución de la personería jurídica y la devolución de los bienes, hecho ocurrrido hace 36 años.
El 25 de febrero del año 1977, la Biblioteca Vigil fue intervenida a través del decreto 924/77 por el entonces capitán de corbeta Esteban César Molina, «con la excusa de normalizar la situación económica de la institución», recordó Duri. La biblioteca era multifacética: contaba con escuelas primaria y secundaria, y Escuelas de Música, de Artes, de Teatro, y de Capacitación, llamada Universidad Popular. También poseía un observatorio astronómico, una editorial propia, y un Museo de Ciencias Naturales con una valiosa colección de mariposas, que servía a los entomólogos para la clasificación de esas especies.
Una semana después de la intervención, los militares cerraron las escuelas de la Biblioteca, la caja de ayuda mutual, la guardería y el Centro Materno Infantil, que funcionaban en el edificio de 7 pisos ubicado en Alem y Gaboto, del barrio La Tablada, en el oeste de Rosario. Dos meses más tarde, ocho miembros de la comisión directiva, entre ellos el propio Duri, fueron encarcelados y torturados en la Jefatura de Policía local, recordó el ex directivo.
A las escuelas de la Biblioteca Vigil, que llegó a contar con 600 empleados, asistían 2.500 alumnos, en los niveles primario y secundario, bajo la modalidad de doble escolaridad, que -hace casi 40 años-, era una medida innovadora en materia educativa. La Biblioteca también puso en marcha la llamada Universidad Popular, tenía además una escuela de Música y un Observatorio Astronómico cuyo telescopio era el tercero de esas características en el mundo, fabricado en Alemania.
Al momento de su intervención «la Biblioteca contaba con más de 80 mil volúmenes y superaba los 21 mil socios, más que el Club Rosario Central en aquella época», comparó Duri. El directivo expresó que la intervención «fue una de las tantas barbaridades cometidas en aquel período aciago, ya que se quemaron y guillotinaron libros, textos que apuntaban a esclarecer situaciones que hoy, a más de 30 años, podemos decir que eran ciertas», afirmó.
El ex presidente de esa entidad recordó que el 10 de mayo de 1997 «ocho integrantes de la comisión directiva fuimos encarcelados durante un año en la jefatura de Policía rosarina, y estuvimos a disposición del Poder Ejecutivo Nacional». «Durante un tiempo estuvimos como desaparecidos hasta que el 12 de julio de ese año los diarios publican que estábamos detenidos y entonces fuimos legalizados como detenidos políticos», recordó Duri. A 36 años del saqueo a la Biblioteca, por parte del gobierno de facto, hoy sus directivos siguen consiguen la restitución de la institución, que fue una de las más importantes y gigantescas empresas culturales privadas que tuvo la ciudad de Rosario.
El 25 de febrero del año 1977, la Biblioteca Vigil fue intervenida a través del decreto 924/77 por el entonces capitán de corbeta Esteban César Molina, «con la excusa de normalizar la situación económica de la institución», recordó Duri. La biblioteca era multifacética: contaba con escuelas primaria y secundaria, y Escuelas de Música, de Artes, de Teatro, y de Capacitación, llamada Universidad Popular. También poseía un observatorio astronómico, una editorial propia, y un Museo de Ciencias Naturales con una valiosa colección de mariposas, que servía a los entomólogos para la clasificación de esas especies.
Una semana después de la intervención, los militares cerraron las escuelas de la Biblioteca, la caja de ayuda mutual, la guardería y el Centro Materno Infantil, que funcionaban en el edificio de 7 pisos ubicado en Alem y Gaboto, del barrio La Tablada, en el oeste de Rosario. Dos meses más tarde, ocho miembros de la comisión directiva, entre ellos el propio Duri, fueron encarcelados y torturados en la Jefatura de Policía local, recordó el ex directivo.
A las escuelas de la Biblioteca Vigil, que llegó a contar con 600 empleados, asistían 2.500 alumnos, en los niveles primario y secundario, bajo la modalidad de doble escolaridad, que -hace casi 40 años-, era una medida innovadora en materia educativa. La Biblioteca también puso en marcha la llamada Universidad Popular, tenía además una escuela de Música y un Observatorio Astronómico cuyo telescopio era el tercero de esas características en el mundo, fabricado en Alemania.
Al momento de su intervención «la Biblioteca contaba con más de 80 mil volúmenes y superaba los 21 mil socios, más que el Club Rosario Central en aquella época», comparó Duri. El directivo expresó que la intervención «fue una de las tantas barbaridades cometidas en aquel período aciago, ya que se quemaron y guillotinaron libros, textos que apuntaban a esclarecer situaciones que hoy, a más de 30 años, podemos decir que eran ciertas», afirmó.
El ex presidente de esa entidad recordó que el 10 de mayo de 1977 «ocho integrantes de la comisión directiva fuimos encarcelados durante un año en la jefatura de Policía rosarina, y estuvimos a disposición del Poder Ejecutivo Nacional». «Durante un tiempo estuvimos como desaparecidos hasta que el 12 de julio de ese año los diarios publican que estábamos detenidos y entonces fuimos legalizados como detenidos políticos», recordó Duri.
A 36 años del saqueo a la Biblioteca, por parte del gobierno de facto, hoy sus directivos apoderados , vecinos y vecinas y ciudadanos de toda la ciudad comienzan el largo camino de la recuperacion luego de la restitución de una de las más importantes y gigantescas empresas culturales que tuvo la ciudad de Rosario.
Para agendar
Todos los sábados vecinos, socios y amigos, se encuentran para rasquetear, pintar, tomar mates y disfrutar de este arduo trabajo de recuperación de la entrañable biblioteca Vigil. Los encuentros son acompañados por músicos y poetas que desde el corazón se están sumando a la movida.
Este sábado 3 de agosto tocarán: Martín Capra (Rosario), Fabián Bret (Córdoba) y José Miel (Buenos Aires). También habrá un esmerado servicio de buffet. Acercate a partir de las 10 hs. a Alem y Gaboto.
* Ver notas realizadas por enREDando sobre el proceso de vaciamiento y la sostenida lucha por su recuperación